Jerome Powell answers questions from the reporters on may 7 2025
Jerome Powell responde a las preguntas de los periodistas tras la reunión de política monetaria del 7 de mayo de 2025. (Foto sitio web de la Fed)

¿Es Jerome Powell realmente tonto?

La Fed mantiene su tipo de interés sin cambios y el presidente Trump llama tonto al presidente de la Fed, exigiendo recortes de tipos inmediatos.

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La tensión entre la Casa Blanca y la Reserva Federal alcanzó un nuevo punto álgido esta semana. Mientras el presidente Donald Trump implementa una agresiva política arancelaria y exige recortes de tasas para estimular la economía, el banco central estadounidense decidió mantener sin cambios su tasa de referencia y lanzó una advertencia sobre los riesgos crecientes para la inflación y el empleo.

El miércoles, los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) votaron por unanimidad conservar las tasas en el rango de 4,25% a 4,50%, una pausa que refleja la creciente incertidumbre económica provocada, en parte, por las políticas comerciales del propio presidente.

“Hay una gran incertidumbre sobre dónde terminarán las políticas arancelarias y cuáles serán sus implicancias para la economía”, afirmó el presidente de la Fed, Jerome Powell, en rueda de prensa. La referencia es directa a la ofensiva arancelaria lanzada por Trump en abril, que incluyó fuertes gravámenes a las importaciones desde China y un arancel base del 10% para la mayoría de los demás países, aunque luego se introdujeron pausas y renegociaciones parciales.

Inflación y empleo: los nuevos dilemas

Aunque los indicadores duros —como la baja tasa de desempleo y la estabilidad de la inflación— han sido positivos hasta ahora, las encuestas muestran una caída en la confianza del consumidor y el temor de que los precios aumenten. Algunos economistas advierten que las tarifas pueden traducirse en estanflación: una combinación indeseada de inflación con desaceleración económica.

“El panorama es complejo. La Fed no tiene muchas buenas opciones en este momento”, opinó Rodney Ramcharan, execonomista de la Reserva Federal y actual profesor de la Universidad del Sur de California, en declaraciones a AFP.

Según Jay Bryson, economista jefe de Wells Fargo, lo más prudente sería esperar a tener mayor claridad sobre el futuro del comercio internacional. JPMorgan, por su parte, proyecta que la Fed podría recortar tasas en septiembre si comienzan a debilitarse los indicadores laborales.

Trump contra Powell

La decisión de la Fed no tardó en provocar una reacción airada del presidente Trump, quien este jueves llamó “tonto” a Jerome Powell desde su red Truth Social. “Es un TONTO, que no tiene ni idea”, escribió el mandatario, acusando al presidente del banco central de no actuar con la urgencia que la situación requiere.

Trump sostiene que no hay evidencia de inflación significativa y que “casi todos los costos han bajado”. Sin embargo, esa visión contrasta con las preocupaciones de la Fed sobre el impacto inflacionario de los aranceles, un asunto que pone en entredicho la independencia del banco central.

No es la primera vez que Trump lanza ataques personales contra Powell. En abril, lo había calificado de “gran perdedor” y, aunque luego dijo que no pretende destituirlo, ha reiterado su exigencia de recortes de tasas.

Ante la presión, Powell respondió con serenidad: “Siempre vamos a considerar solo los datos económicos, la perspectiva y el balance de riesgos. Y eso es todo”.

Una pausa con implicaciones políticas

Esta nueva pausa en las tasas no es neutra. Se da en un contexto en el que la economía estadounidense sigue creciendo, pero muestra señales de vulnerabilidad. Al mismo tiempo, el calendario político avanza y la presión de Trump sobre la Fed parece cada vez más estratégica, en busca de un estímulo económico que favorezca su administración.

Para la Reserva Federal, el dilema es mantener la credibilidad de su doble mandato: mantener la inflación bajo control y asegurar el pleno empleo, sin ceder ante las presiones políticas de corto plazo.

Mientras tanto, los mercados financieros celebraron la decisión con subidas en Wall Street, aunque persiste la cautela. Todos los ojos están puestos en los datos del verano y en si la Fed cambiará el rumbo antes del cierre del año.

Con información de AFP