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Plastic pollution.
La polución por el plástico está fuera de control. Foto: Pixabay.

Buscan tratado global para enfrentar la amenaza climática del plástico

En Uruguay se iniciaron negociaciones para definir los detalles contra este tipo de contaminación.

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“La industria del plástico es en realidad la fuente de gases de efecto invernadero industrial de más rápido crecimiento en el mundo. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente estima que las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de la producción, el uso y la eliminación de plásticos podrían representar el 19 % del presupuesto mundial total de carbono para 2040”, resalta la Organización de Naciones Unidas (ONU) mientras señala a este material como uno de los principales culpables del cambio climático. 

Aunque los líderes mundiales se comprometieron, en una conferencia de la ONU, a participar de un acuerdo oficial sobre el plástico hasta 2024, hasta el momento no se ha oficializado un mapa de ruta que permita tratar apropiadamente la urgencia que representa esta amenaza para el planeta. 

Puntos clave

Recientemente iniciaron en Uruguay una serie de negociaciones por parte de delegados de la ONU, organismos especializados y ONGs, que buscan sellar el compromiso para enfrentar la contaminación con plástico y concretar detalles sobre cómo abordar la producción y la eliminación de este material.

De acuerdo con datos de la Fundación Heinrich Böll compartidos por DW, se estima que entre 1950 y 2015 se produjeron unos 8.300 millones de toneladas de plástico en el mundo, donde solo el 10 % fue reciclado.

Asimismo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) advierte que de no haber un cambio de política y cultura el consumo podría pasar de los 460 millones de toneladas de 2019 a 1.200 millones de toneladas en 2060.

“Los plásticos no son un material distinto, sino un grupo de materiales con diferentes composiciones y características. De hecho, hay miles de variedades de plástico diferentes. Sin embargo, alrededor del 99 por ciento de los plásticos que usamos hoy en día provienen de combustibles fósiles como el petróleo, el gas o el carbón. Por lo tanto, la producción de plástico está profundamente vinculada con la cadena de suministro de combustibles fósiles, y muchas empresas de combustibles fósiles poseen, operan o invierten en infraestructura de producción de plástico”, remarca la ONU advirtiendo que muchas estadísticas sobre el tema no son fiables y el daño podría ser mucho mayor.

¿Habrá consenso global?

Mientras que los científicos aún no llegan a un acuerdo sobre la amenaza que representa para la salud la presencia de partículas de microplástico en el organismo, los expertos señalan que se debe pasar lo más rápido posible de un enfoque como el actual, en el que cada país aborda el problema a su manera, a uno que asuma esta batalla de manera global.

Desde distintas organizaciones ambientalistas buscan que se establezca una norma mundial para que las empresas informen de la cantidad de plástico producida, el origen de los productos petroquímicos empleados y su composición.

El acuerdo también busca que los países con más altos ingresos, como Estados Unidos y el Reino Unido, que de acuerdo con un estudio de Science Advances fueron los que más residuos plásticos per cápita generaron en 2016, apoyen económicamente a las naciones en desarrollo para tratar el problema del abandono del plástico.

Mientras que en la Unión Europea (UE) los productos plásticos de un solo uso están prohibidos, en Estados Unidos aún no existen leyes federales sobre el plástico desechable, lo que denota una amplia brecha en la búsqueda de un consenso global sobre el tema. 

“Para mitigar los impactos climáticos, ambientales y de salud de la contaminación plástica, debemos cerrar el grifo y eliminar la contaminación plástica en su origen, no solo reduciendo su uso a nivel individual sino también reduciendo su producción general”, enfatiza la ONU.

¿Cómo ayudar?

La ONU destaca las siguientes acciones para que cada persona aporte su grano de arena en esta lucha por la supervivencia: 

  • Defender y apoyar la implementación de políticas y leyes para reducir la producción de plástico, impulsar el diseño circular, mejorar la gestión de residuos y responsabilizar a los contaminadores.
  • Apoyar iniciativas que brinden soluciones críticas para reducir la contaminación plástica y abogar por que los gobiernos y las empresas actúen.
  • Conviértase en un defensor de la reducción de la contaminación plástica y ayude a cambiar el comportamiento de los demás.